viernes, 7 de febrero de 2014

Glosario de cosas que no quiero que se me queden en el tintero

Mientras escribo la crónica de estos días como jardinero, os dejo con un pequeño glosario de cosas variadas que me habéis comentado o dicho o que sencillamente quiero decir, que pa algo el blog es mío. Escribo mucho y muy lentamente, lo sé, yo os agradezco vuestra paciencia y constancia; pero es que escribo desde el móvil y entre mis dedos patosos y el autocorrector que pone lo que le da la gana, no hay quien escriba dos lineas seguidas.

ACERAS : Haberlas haylas. Pero por la seguridad del peatón, es mucho más seguro andar por la carretera. Sobre las aceras es como si hubiera caído una bomba atómica.

ALCOHOL : Yo no lo hubiera dicho, pero me dicen José y Carmen que es un auténtico problema en esta parte del país: al parecer la gente bebe mucho, incluyendo mientras trabajan; yo no lo noto pero dicen que, a media tarde, muchos de los indios con los que me cruce estarán borrachos.

BINDI : Es el típico puntito en la frente que llevan las mujeres indias. He de romper un mito: no sólo lo llevan las mujeres, también hay muchos hombres con bindi. Lo lleva mucha gente, puede estar hecho de polvo o ser una pegatinita, y no quiere decir nada (yo creía que tenía algo que ver con si estás casado o no, pero qué va), es como quien lleva unos pendientes. En la puerta de algunos templos ponen un montoncito de polvo y todo el mundo que pasa se pone un bindi de ese polvo, supongo que será un bindi bendecido. Es también curioso que las estatuas en los templos tienen siempre bindis en la frente que la gente les pone.

COMIDA : La comida está siendo una buena sorpresa, pues estoy encontrando platos que son poco picantes, e incluso los picantes los llevo más o menos bien, aunque a veces después de comer tengo la boca como anestesiada... Lo que no me gusta es que desayunan, comen y cenan lo mismo; y desayunar arroz con curry es bastante triste. Tampoco me gusta que no toman fruta de postre. He probado muchas cosas, lo más típico es el chapati (panecillo con salsas de coco, mango, garbanzos...), el biryani (arroz con verdura o pollo), el khakhra (una oblea de pan), y mi favorito, el uthapan (una especie de pan con trozos de cebolla). A los indios también les gusta lo dulce y en los puestos callejeros venden por cuatro rupias mucha variedad de dulces que tienen en común la saturación extrema de azúcar. Para beber, chai a todas horas, es té con leche y azúcar bastante adictivo.

FAMILIA Y AMIGOS : ¡Os echo de menos! Tres semanas en la India parece que son ya muchos meses... Pero os echo de menos de una manera curiosa: no es que quisiera volver allí a estar con vosotros, sino que me gustaría que vinierais vosotros aquí a experimentar esto conmigo. Os encantaría. Los miedos, las inseguridades, todas esas sensaciones que parecían tirar de mi para que no hiciera este viaje, se han disuelto poco a poco y ahora me pregunto cómo pude alguna vez siquiera tener miedo de venir. Y me gustaría que vosotros, familia y amigos (y compañeras de piso, que sois un híbrido de ambas cosas), experimentarais conmigo esta misma liberación, alegría y fascinación que siento cada instante que estoy pasando aquí. Así que ya sabéis... ¡Saudi Airlines tiene vuelos baratos!

GRIFOS : Es curioso, en las calles hay muchos grifos a disposición de la gente. También lo he viso en las estaciones de tren. No son lo que se dice fuentes y dudo mucho de la calidad de su agua; pero cada dos por tres sale un tubo del suelo con un grifo, útil para lavarse las manos o los pies o sonarse la nariz.

LUNGHI : Hay cierto comentarista que insiste en que me ponga un lunghi. El lunghi es una especie de falda que suelen vestir aquí la mayoría de los hombres. Tiene la peculiaridad de que se puede recoger por la cintura de manera que se puede cambiar de longitud (por los pies o por las rodillas) dependiendo del calor o de yoquesé; cuando está recogido en la cintura parece una especie de pañal gigante. Siento decepcionaros pero por ahora no tengo planes de pillarme un lunghi.

POBREZA : Yo tenía muchos prejuicios antes de venir; entre otros, pensaba que yo sería un rico entre pobres, que la pobreza a mi alrededor sería insoportable. Dicen José y Carmen que la India ha exportado la imagen de su pobreza como España ha exportado la del toreo y las sevillanas o Francia la del glamour y los crepes: esa imagen atrae al dinero. Está todo muy descuidado, sucio y roto; pero creo que eso no tiene que ver con la pobreza sino con el hecho de que a esta gente les han llegado muchas cosas "modernas" demasiado rápido. A ver, que pobreza hay, sí, y supongo que conforme suba al norte veré más y más; pero aqui también hay exuberancia: los mercados están llenos, montañas de frutas y verduras desbordan de las tiendas, hay muchas farmacias, clínicas, escuelas, agua por doquier; en los restaurantes puedes repetir cuantas veces quieras; y la gente, que yo imaginaba que serían casi todos como mendigos, trabajan en oficinas o en el campo, sonríen mucho y charlan en grupo y tienen smartphones y les encantan las fiestas.

PRECIOS : Las cosas aquí, para nuestros estándares, son muy baratas. Puede parecer un tópico pero es verdad. Además hay algo muy bueno, y es que en todos los productos que vienen de fábrica (por ejemplo un bote de zumo, una cuchilla de afeitar o un rollo de papel higiénico), el precio viene impreso en el envoltorio desde la fábrica, con lo que los tenderos lo tienen muy difícil para timarte. El tema de regatear lo llevo regular, pero creo que es algo psicológico: si me ofrecen unos buenos pantalones por menos de 3 euros, aunque soy consciente de que debería regatear hasta al menos un tercio de ese precio hay una parte de mi cerebro que dice "bah, pa qué".

RESTAURANTES : Se come con la mano (derecha), lo cual es genial, aunque a veces es difícil no usar la izquierda para quitarle las espinas a un pescado, por ejemplo. Los restaurantes son muy pequeños. En todos hay un fregadero a la vista de todos donde hay que lavarse las manos antes y después de comer (lo ideal es no mancharse más allá de los nudillos; yo me contento por ahora con no pasar de la muñeca). Se supone que tienes que lavarte sólo la mano derecha para demostrar que no has usado la izquierda. Te sirven agua caliente en vez de fría, al menos aquí en Kerala, cosa que no me gusta. Se come levantando el codo, a ver si me explico, no te echas la comida en la boca desde abajo sino desde arriba (los indios expertos ni siquiera se tocan los labios con los dedos sino que se lanzan la comida desde cierta distancia). A veces te sirven el arroz en una hoja gigante de platanera; al final de este espectáculo comidil, si doblas la hoja hacia ti quiere decir que te ha gustado, si la doblas hacia fuera quiere decir que no. Para terminar, a la salida hay un cuenquito con semillas de anís y yoquesé más que se mastica y esta muy rico y dicen que es digestivo.

RETRETE : Por ahora, en todas las ocasiones salvo en una he tenido un buen suministro de papel higiénico. Para el caso contrario o de terminación inesperada del suministro, siempre hay cómo no un grifito al alcance de la mano... (izquierda). Hay retretes a la europea y también a la turca; no problem. Por ahora sólo he visto un baño especialmente sórdido, fue en el bar donde cené en Palani; era el baño de un edificio entero y me alegré de que las luces fueran tan mortecinas que impidieran ver alrededor.

SEXISMO : La separación entre sexos es bastante fuerte. No a un nivel institucional (los colegios son mixtos y tal), pero sí a un nivel práctico: los hombres y las mujeres se sientan por norma general en lados diferentes del autobús, no van mezclados en los rickshaws, y los niños y las niñas nunca juegan juntos (en la clase de inglés que presencié en casa de José y Carmen, los niños se sentaron sin mezclarse ni hablarse, cada vez que una niña leía los niños cuchicheaban, y viceversa... también recuerdo, en mi segunda fiesta en Pondicherry, cómo los maridos celebraron sus cumpleaños separados de sus esposas, que estaban en la habitación contigua!). Sé, y no sólo por lo que cuentan por ahí, que esta sociedad es injusta con las mujeres (como lo es la nuestra); pero, sinceramente, no parece que estén reprimidas ni que se las considere inferiores, más bien se las ve fuertes e importantes, las mujeres y las niñas sonríen y gritan y escupen también; y se ríen cuando las saludo con mi malayalam atahivillerado. Por lo demás, es muy raro ver a un hombre y una mujer andar agarrados; pero sí se ven muchos hombres que caminan cogidos de las manos o con los brazos por los hombros; es su manera de demostrar la amistad.

VEHICULOS : Hay muy pocos coches, y los que hay son por lo general cochazos. José y Carmen tienen un land rover del año de la pera pero no es lo habitual. Luego hay muchísimas motos, con cuantos ocupantes quepan. Si conduce un hombre, la mujer va detrás con las dos piernas hacia el mismo lado no vaya a ser que se les levante el sari. Los rickshaws son los amos de la carretera: triciclos con capota que hacen lo que les da la gana, jamás ponen el taxímetro y, ¿cómo explicarlo?, son unos auténticos salvajes/genios del asfalto. Por último los autobuses, que son como fiestas ambulantes; sus conductores son temerarios y locos, y por fuera están iluminados como con guirnaldas de navidad; el claxon suele ser alguna musiquilla hortera. Todos los vehículos tienen en común llevar en el salpicadero un altarcito en honor a Ganesh, el dios-elefante, eliminador de obstáculos (lo cual define bastante bien la actitud de los conductores indios...). El pobre Ganesh debe estar hecho un lío.

ZUMO DE MANGO : Mi bebida favorita aquí; una de las sustancias más adictivas del planeta. Supongo que José y Carmen no aprobarían su consumo, pues tiene muchísima azúcar y creo que productos químicos, de hecho supongo que el mando será el menos importante de sus ingredientes. Pero es tarde: me enganché desde el primer día. Asi que cuando me imaginéis andando por la calles de la India, ¡que sea tomándome un zumo de mango!

3 comentarios:

  1. uuuuuff!!! Richar, menos mal que has escrito!!! estaba ya que iba a explotaar. aquí la peña estamos to enganchaos al bloj; que si el Eleuterio, q parece ser q él también ha estao por esos lares, q si el Migue, la Mariapura que es la madrequemeparió y a ti también, el mediomaratoniano que hase tiempo que no comenta, Leti cuentakilómetros y la semilla del resplandor que... semilla del resplandor! quién eres? que me tienes mu intrigá!
    Buenoooo pos eso, q estamos los que comentamos ansiosos de leer cosas. y los hay q no comentan eeeh! q lo sé de pura cepa! Espero que traigas Bindis para todos y cosas ricas y y... y que te laves esa mano izquierda antes de venir pa acá!!

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  2. Mira, lo más importante es lo de la mano que dice Felia, que eso lo hemos hablao tos los blogeros y estamos absolutamente de acuerdo, que nose te vaya a olvidar, porfi, ehhh?

    En segundo lugar, decirte que me rilo, illo, que es que me rilo con tu bloj del viajecito, tu sabe.
    Menos mal que vas solo al sur. José y Carmen, antes de que fuéramos, nos aconsejaron que fueramos antes al norte, y no se equivocaron con su consejo. Son dos partes completamente distintas de ese mundo tan espetacular.

    Aiam grin of envi, yunou, so gri. Ai would laik tu bi güiz yu there, Rixal, joler.

    Cierto comentarista híbrido.

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  3. Mesolvidaba:

    Dile al menda que pone los numeritos pa publicar en tu bloj que ya le vale, que enfoque un poco mejor la foto que hace en las puertas de las casas.
    Enga.

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